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¡Vamos a explorar juntos!

La Leyenda del Viejo Andrajoso

La historia habla de una fiesta situada en el pueblo de Socoroma, que en aymara se dice chukuruma y significa "agua que corre", una fiesta con personas bailando y músicos tocando con mucho entusiasmo.

Estaban en una casa, todos alegres y divirtiéndose al son de las zampoñas, cuando de pronto, aparece un anciano vestido con andrajosPrenda de vestir vieja, rota o sucia.. Los invitados, al verlo así con ropita vieja, se molestan y lo insultan, buscando que el hombre se fuera del lugar. Cuenta la leyenda que los músicos lo defendieron, evitando que lo sacaran de la celebración.

Y no solo eso, además de protegerlo de los gritos e intentos de golpes, los músicos lo lavaron con cuidado y lo invitaron a almorzar con ellos. También una señora que cargaba una wawaDe la lengua aymara: "Niño, bebé o recién nacido". se mostró muy preocupada por él. Acto seguido, le sirvieron mucha comida, para que el anciano pudiera disfrutar como todos en aquella festividad.

Una vez que terminó de comer, el viejo haraposo Que va vestido de forma desaliñada. decidió marcharse. No obstante, (y esta es la parte más interesante de la historia), hizo una gran advertencia a los músicos y a la señora que permanecía con su hijo: "Me iré, pero amigos zampoñeros, váyanse de aquí muy lejos, sin mirar atrás, porque algo terrible va a pasar".

Los músicos y la señora quedaron sorprendidos por la revelación del viejo y de inmediato dejaron los festejos para salir del pueblo. Estaban decididos a seguir las instrucciones por miedo a lo que pudiera suceder. Sin embargo, en un instante de duda o curiosidad, cuando ya estaban en lo alto del cerro, miraron hacia atrás y quedaron convertidos en piedra.

En Pusiri Collo, o cerro de los músicos, están las piedras con la forma de los músicos, se puede ver también sus instrumentos, sus zampoñas, su tambor y bombo. La mujer igual está, con su hijo a la espalda. Todos petrificados por no seguir las órdenes del anciano.